lunes, 24 de mayo de 2010

Azkorri...

La noche anterior un cielo despejado y una Luna preciosa hacían presagiar que el día sería fantástico en lo metereológico.

Mi primer propósito sería dar un paseo por el acantilado. Capas y capas de crema solar con factor de alta protección, ropa apropiada para la ocasión y a caminar. El kimono lo dejé en su correspondiente caja, muy cerca de la tetera de hierro, no era el momento para ir pertrechada con todo el equipo.

Un día fantástico en lo metereológico¡¡¡¡¡




Un lugar muy goloso para amantes de las fotografías estupendas, amantes de las buenas vistas, más bien diría para los amantes de todo tipo.



Un lugar donde los amaneceres y anocheceres se hacen espectaculares, con el añadido de un olor a salitre profundo y penetrante que incluso asciende hasta lo alto del acantilado gracias a la brisa.

Sólo pretendía dar un paseo, pero animada por las hormonas del bienestar de las que uno se recarga cuando hace algo de ejercicio, me fui animando y pasito a paso llegué hasta la playa. Primero bordeé el campo de golf y desde allí se oían a lo lejos y gracias al claro eco algunas conversaciones de algunos "golfistas".
Mi intención no era tomar el Sol puesto que en este momento mi color no es pálido, es más bien transparente. Había desechado ya de salida la idea del bikini playero.
Pero desde lo alto la vista era sensacional ( en lo metereológico y ya van tres veces). El invierno se ha hecho largo y estos primeros días de Sol junto al hogar se me hacen todo un lujo.
Bajé a la playa.....(mientras escribo estas líneas suena la sirena del crucero en el puerto saliendo a alta mar)...en la orilla una mujer joven y embarazada paseaba y ponía la nota excepcional al momento puesto que el resto de paseantes en su mayoría eran hombres. Hombres de diferentes edades. Este hecho se me hace extraño: un día de labor, en horario de mañana y hombres paseando. La pregunta puede ser si no tienen trabajo??? trabajan a turnos??? pero claro la misma pregunta se formularán ellos en relación a mí.

Un encuentro casual me alegra el día ¡¡¡¡

El día se esperaba fantástico en lo metereológico, pero de pronto se había vuelto fantástico...las hormonas del bienestar estaban emocionadas...había dejado de ser transparente¡¡¡


El día ha terminado en tormenta, pero hoy nada ni nadie me lo estropea¡¡¡. Mañana tendré que acercarme al acantilado...mientras llega mañana escucho a Café del mar...Dream on.

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