lunes, 4 de octubre de 2010

un banco...

Una mujer mayor ocupaba mi banco...



Éste no es el original. He elegido para la ocasión un lugar paradisíaco, un banco de altura¡¡¡.

Mi banco pertenece a una multipropiedad. Se trata de uno de esos bancos que forman parte del mobiliario urbanístico del lugar en donde vivo. Un banco de madera, un banco común en su apariencia.

Pero a base de incorporarlo en mi día a día, en mis hábitos, en mi parcela de bienestar...lo he hecho mío¡¡¡


Un lugar estratégico en dónde disfrutar de los rayos del Astro Sol es todo un lujo¡¡¡

Una mujer mayor ocupaba mi banco, el banco... y ahora era, es su banco...a mi paso no levanta la mirada. Ella está absorta en la lectura de un libro. No sé por qué motivo me resulta extraño??? seguramente porque pienso que mi proximidad le alertará de que alguien, otra persona se aproxima...pero no es así.

Qué libro la tiene tan ensimismada???

En este caso mi problema de presbicia no será un obstáculo. La distancia es la correcta y puedo leer el título del libro.

Interesante, muy interesante¡¡¡

A mi paso la mujer no modifica su estado de abstracción. Aquello que lee le interesa mucho más que lo que sucede a su alrededor.

Atreverse a vivir¡¡¡ ése es el título...su autora Miriam Subirana. La idea de vivir sin miedo...

Aquella mujer mucho más mayor...me ha dado la oportunidad de escribir hoy sobre algo concreto, nada abstracto. Me ha dado la posibilidad de pararme a pensar en la idea de vivir sin miedo...


Los miedos que los humanos tenemos,  incluso los más mayores o precisamente son mayores los miedos???

Ese banco, un lugar de multipropiedad, seguirá siendo mi banco y también el suyo...y el de muchas otras personas. También hay días en los que en ese banco no me paro a pensar y tan sólo me detengo a disfrutar...de unos rayos de Sol¡¡¡

Al más puro estilo Forrest Gump sentada en el banco...veo que la vida es una caja de bombones¡¡¡¡


Y a mí me encantan los bombones¡¡¡

No hay comentarios:

Publicar un comentario