Se trataba de una despedida. Me quedaban pocas horas de disfrutar en mi semana de libre y debía despedirme de las olas, de la arena. Despedirme de hundir mis pies en esa arena mojada y balancear mis caderas.
Despedirme de un paisaje único...
Al día siguiente debía incorporarme una vez más al Campamento, todo un festival de luz y de color. Acudiría ataviada con un frontal de luz, pertrechada con mochila y cesto para el picnic e iniciaría una nueva jornada de trabajo: 24 horas en un día de fiesta local.
Era pronto y el día había amanecido muy soleado. Los socorristas aún no habían hecho acto de presencia, no era la hora y la bandera no ondeaba aún en el mástil. Todavía podía disfrutar del Mar Cantábrico en todo su esplendor. Al día siguiente sería otro escenario.
Unas diez personas nos repartíamos la multipropiedad playera en un día de verano...
Textiles y no textiles: algunas personas desprovistas de toda vestimenta que les etiquete en alguna banda socioeconómica, luciendo piel y lorzas. Yo misma ataviada con un pareo-amigo-complice-salvavidas de autoestima paseaba también mi delicada piel y delicadas lorzas.
Otras personas como Rosie Huntington no lucen lorzas...
El surrealismo es todo un clásico en el blog y también en mi vida cotidiana...
A lo lejos, sobre las rocas, se divisaban tres figuras: una novia, un novio y un fotógrafo. Desconozco si se trataban de novios auténticos, de los que prometen y se comprometen o tan sólo se trataba de una "performance".
La novia lucía un fastuoso vestido blanco en un principio...que por momentos variaba de color entre el verdín de las rocas y las olas. La novia parecía una auténtica equilibrista.
El novio lucía un discreto traje con chaleco. En principio las fotos formales de traje, luego más tarde en chaleco, para terminar de una manera menos formal y "casual" en camisa.
La novia parecía dominar el equilibrio y la armonía sobre las rocas. En un principio enseñaba los zapatos de tacón, para terminar enseñando la liga.
Fotografías que dejarían constancia de un momento especial: real o ficticio.
Desconozco si esa pareja será y es real. Desconozco si sus vidas se entrelazan y permanecerán entrelazadas...
Yo lo desconozco todo: tan sólo era una espectadora privilegiada en primera línea de playa...
Textiles y no textiles. Hombres y mujeres. Los socorristas que llegan a la playa. Dos ciclistas se aproximan para ver a los equilibristas en las rocas.
Momento surrealista: el Sol queda relegado a un segundo plano. Por unos instantes parece que una nube toma todo su protagonismo...
Noooo¡¡¡¡ no se trataba de una nube. Una persona dirigía o se dirigía, volaba y sobrevolaba la playa en un parapente. Unos segundos después otro parapente hacía su acto de presencia.
Qué pensarían aquellas personas desde lo alto del cielo??? cuál sería su prioridad visual??? el paisaje, el acantilado, el mar, los textiles o no textiles, los novios???
Surrealismo en estado puro¡¡¡.
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